sábado, 8 de junio de 2013

Relojeros & la Inquisición Española (parte 2ª)



En este contexto hemos de colocarnos para comprender mejor  la vida y obra de nuestros protagonistas” Los relojeros” 

En el libro de Werner Thomas (los protestantes y la inquisición en España en tiempos  de la reforma” figuran unos curiosos cuadros  numerados donde figuran los reos , estos cuadros  esquemáticos reflejan los distintos oficios a los que pertenecían los reos; en el cuadro donde figuran los relojero pueden contabilizarse tal número, que el mismo Warner Thomas manifiesta sorprendente y añade:

La amplia presencia de artistas extranjeros en las salas inquisitoriales que convirtió a este sector en el más perseguido de todo el sector secundario, es la lógica consecuencia de esta migración. Se manifestaron en todos los distritos de la Península Iberica , pero con ligeras concentraciones en Toledo (dieciséis reos, la mitad en Madrid), Zaragoza y Logroño(trece reos cada una, cinco en cada una de la sedes inquisitoriales) Cataluña (diez reos, seis en la capital),Sevilla(ocho reos), Cuenca (siete reos  )y Valencia( seis reos):Los otros seis tribunales no condenaron , sino a individuos aislados. Con cincuenta personas condenadas, los franceses dominaron el grupo. Los flamencos dieciocho en total se dedicaron a la fabricación de retablos. Había entre ellos, tres entalladores de madera, tres imaginarios, un pintor de retablos y dos emsambladores.Dos tapiceros condenados también eran flamencos. Finalmente los había entre pintores (tres), plateros, (uno), relojeros (otros dos), vidrieros, (uno).Los diez Alemanes se dividieron entre los plateros(tres) y los relojeros(cuatro).Además tuvieron un compatriota entre los imagineros, los pintores y los joyeros. Cinco italianos(dos plateros Milaneses y un pintor de Torino  otro de Vicencia,y el tirador de oro genovés),un joyero polaco y un relojeros ingles de Canterbury cierran la lista



Sorprende el alto números de relojeros entre los reos, de los cuales nueve fueron condenados entre 1560 y1571, es decir en una época en la que los grandes centros europeos de relojería contaron con apenas unas personas más. Alrededor de 1560 había unos veinte relojeros en Paris, menos de diecisiete en Blois, unos diez en Lyon y menos de veinte en Ginebra. Solo en las ciudades alemanas de Augsburgo y Núremberg había dos gremios de unas decenas de relojeros. El grupo de relojeros detenidos por el Santo Oficio debe haber representado un altísimo porcentaje de los relojeros activos en la Península Ibérica en aquel momento
Los grandes centros mencionados desempeñaron un papel importante en la formación profesional de los relojeros europeos. De los cuatro alemanes, uno en Paris y otro en Lyon
El inglés Joan Robín, natural de Canterbury, condenado en 1563 por el tribunal de Valladolid, debió de recibir su formación en España puesto que hasta 1580 no hay huellas de relojes ni relojeros ingleses en Inglaterra. Al contrario, los pocos que trabajaron en la Corte eran  todos  extranjeros. De hecho, Londres no se convirtió en un centro de relojería hasta la última década del siglo XVI.
Es imprescindible saber que durante estas épocas muchos se refugiaron en las montañas  Castellano- Galaicas y también en las zonas Pirenaicas, pero esto lo trataremos en otro tema, de ahí que se especule con la formación de Juan Jalón, natural de Châlons-sur-Marne, relojero  establecido en Londres.



Sobre todo al comienzo del siglo XVI, las perspectivas profesionales de los relojeros eran aún limitadas, y aunque la posesión de relojes, tanto de uso público, como de aquellos destinados a uso doméstico, ya no era privilegio de municipios , catedrales , iglesias , monasterios, palacios reales y alta nobleza, como ocurrió en el siglo XV donde el número de personas que podían permitirse la adquisición de tal producto de lujo, era aún bastante reducido y se limitaba a la alta burguesía. La demanda local pocas veces era suficiente para que los relojeros pudiesen ganarse la vida estableciéndose permanentemente en un lugar.
Los relojeros solucionaban  las desventajas provocadas por la estructura de la demanda combinando su oficio con otras especialidades, como la herrería y la cerrajería antigua, Juan Jalón por ejemplo viajo en 1513  a la Península Ibérica, teniendo la edad de veinte años, estuvo tres años en Burgos  , después se fue a Madrid probablemente contribuyó a la creación del “Reloj de La Puerta de Guadalajara”. Los tres años siguientes Jalón  Instaló relojes  en varias Iglesias de Toledo, Almorox, Madrigal de las Altas Torres, Cebreros y Mediana del Campo. Donde trabajo para el Marques de Villena, haciendo cinco relojes. Allí se estableció finalmente en 1519,  se casó y su sedentarización, obviamente tuvo consecuencias profesionales. El hecho de que contratase al cerrajero Bartolomé Flamenco indica que diversifico las actividades de su taller. En los años siguientes fabrico  relojes como por ejemplo en 1528, cuando estuvo en el Convento de los Franciscanos de Escalona. La distancia entre el Convento y su domicilio indicaba que por aquellas épocas  el número de relojeros en Castilla era bastante reducido. A la luz de la demanda cada vez más creciente, aunque geográficamente hablando aún bastante dispersa, hubo relojeros que prefirieron sustituir esta combinación de oficios por una vida ambulante. En vez de asentarse en una ciudad ejerciendo dos profesiones para completar los ingresos que la relojería no siempre daba, el relojero empezó a viajar de una ciudad a otra, desplazándose cada vez que la demanda  de relojes se saturara.


De esta manera había  relojeros que incluyeron a la Península ibérica en si itinerario ya si como relojeros españoles que traspasaron nuestra fronteras. Aquellos que fueron detenidos por el santo oficio habían recorrido su patria  durante mucho tiempo. La decisión de viajar desde Francia al sur sin duda se pudo motivar por las perspectivas laborales que se les ofrecía aquí en España, pero también para aprender  las técnicas y adelantos de nuestros  escasos relojeros. En algún archivo de las catedrales de España nos hemos encontrado con nombres  de relojeros extranjeros, que  vinieron para satisfacer la demanda de  de relojes  de campanarios, que en aquella época era relativamente alta
Tomemos por ejemplo a Juan Pierret natural de Beauvais nacido en 1539, a los diecisiete años Pierret  se dirige a Lyon , uno de los primeros centros de relojería en Europa. Antes de viajar a Madrid donde la corte era un factor  estimulante de gran importancia. Se asentó durante un mes con  el relojero real Martin Alteman, así como el también relojero real Maese Luis Francés. Luego inicio su propio negocio en las cercanías  del Alcázar, aunque aparentemente sin ningún éxito. Pues abandono la ciudad en para establecerse en Sevilla con su compatriota Juan del Pozo. En breve tiempo entre su llegada y su detención por la Inquisición, año y medio después , cobraron mucha fama por ser los dos franceses, los únicos relojeros que quedaron en la ciudad
Sin embargo en las zonas más alejadas la combinación de oficios persistió durante cierto tiempo más.
Juan Enríquez, natural de NImeja hizo su aprendizaje en Amberes y Paris , viajo a Cádiz en1551 , se asentó en Baza con el cerrajero  Martin Ruiz el Mozo se asentaron una temporada en Santa María de Campo Rus , allí  entre los dos construyeron un reloj. En la cuaresma de ¡560, por ejemplo se dirigió a Villanueva de Alcadete donde hizo un reloj ,pues dicen que allí no había oficial que los hiciese.. Después del matrimonio de Ruiz , este llevo a Enríquez a su propio taller  trabajo durante más de cinco años , finalmente Enríquez  empezó su propio negocio en Quintanar de la Orden , pueblo donde en aquel momento se pidió  un reloj para la torre. También, después de su proceso inquisitorial,  Enríquez declaro a los inquisidores que el allí se ganaba bien la vida. Con el tiempo se dedicó enteramente a la  fabricación de relojes, a diferencia por ejemplo del Maese Miguel. En 1567 el tribunal de Murcia detuvo a este francés en Caravaca, donde se había establecido.
Es la de los relojeros la información que más abunda en los archivo de la Inquisición, aunque la vida de los otros artesanos extranjeros a tenor de las causas abiertas no debió ser muy diferente

No hay comentarios:

Publicar un comentario